Orígenes de la informática

La informática, como disciplina, tiene sus raíces en el desarrollo de herramientas y técnicas para el procesamiento de información. Sus orígenes se remontan a la antigüedad, con la invención de dispositivos como el ábaco, que facilitó los cálculos numéricos. Sin embargo, el verdadero impulso a la informática moderna comenzó en el siglo XX con la creación de las primeras computadoras electrónicas, como la ENIAC, que permitieron realizar cálculos complejos a gran velocidad. Este avance sentó las bases para el desarrollo de algoritmos y lenguajes de programación, que son fundamentales en el manejo de datos.

A medida que la tecnología avanzaba, la informática se diversificó en múltiples áreas, incluyendo la teoría de la computación, la inteligencia artificial y la ciberseguridad. La creación de redes de computadoras y, posteriormente, de Internet, transformó la manera en que se comparte y procesa la información, conectando a personas y sistemas en todo el mundo. Hoy en día, la informática no solo es esencial en el ámbito científico y empresarial, sino que también ha permeado la vida cotidiana, afectando desde la comunicación hasta el entretenimiento, y sigue evolucionando constantemente con innovaciones tecnológicas.